El Hobbit comienza su viaje

¡Hoy es el gran día! Tras una larga espera, se estrena la primera parte de las tres en que se divide la adaptación que Peter Jackson ha realizado de El Hobbit, la novela con la que que Tolkien empezó a crear su famoso mundo mitológico y que fue precursora de El Señor de los Anillos. En ella se relata como el hobbit Bilbo Bolsón, interpretado en la película por Martin Freeman, encontró el famoso anillo único de Sauron, que tantos quebraderos de cabeza traería en la trilogía posterior, durante un viaje al que se ve arrastrado por el mago Gandalf, de nuevo interpretado por Ian McKellen, para ayudar a unos enanos a enfrentarse con un dragón llamado Smaug que les ha arrebatado su reino y su tesoro.

Esta adaptación vivió una auténtica odisea antes de poder ver la luz. Son muy conocidos los problemas por los que ha pasado, desde el enfrentamiento entre Peter Jackson y New Line Cinema por motivos económicos, los bancarrota de MGM o multitud de huelgas de trabajadores en Nueva Zelanda -con incendios incluidos -, donde se ruedan estas películas. Una de las principales consecuencias de estos problemas fue la marcha de Guillermo del Toro, quién iba a dirigir las películas mientras Jackson solo las iba a producir y co-escribir el guión. Sin embargo, gracias a, entre otras cosas, al empeño de Jackson, el proyecto logró salir adelante y en 2010 recibió luz verde por parte de MGM, New Line Cinema y Warner Bros. Pictures.

No obstante, la adaptación llega con algunas dudas. Como el hecho de que en un principio iban a ser solo dos películas y luego fueron cambiadas a tres. Muchos se preguntan si El Hobbit es material suficiente para algo de tal magnitud porque, a diferencia de El Señor de los Anillos, que es una trilogía mastodóntica, El Hobbit es solo una novela, y no muy larga. Jackson ha dicho que también piensa adaptar los famosos Apéndices, pero eso no ha servido para cambiar al personal. Aunque, el mayor problema que la película tiene ahora es la crítica, la cual no se está portando precisamente bien con el film. Los críticos están pulverizando la película, ensañándose especialmente en haber sido rodada con los tan cacareados 48 fotogramas por segundo; algo que, por otro lado, es aplaudido por el mismísimo James Cameron.

Pero, bueno, ya sabéis la opinión que tengo de los críticos y lo poco que les hago caso. Yo prefiero esperarme a ver la película para opinar. Desgraciadamente, no he podido ir a verla hoy, pero espero verla cuanto antes un día de estos. Es mucho lo que llevo esperando para ver esta película. Me encantan las novelas de Tolkien y me maravillaron las películas con las que Jackson adaptó El Señor de los Anillos. Así que ver esta película es una de mis grandes prioridades. Os dejo con uno de sus trailers: