Los resultados de Iron Man 2

La secuela de Iron Man ocupa esta semana el 13º puesto en la taquilla americana. De todas maneras, sus resultados se pueden fijar ya en 308 millones de dólares en EEUU y 302 millones de dólares en el resto del mundo, haciendo una taquilla global de 610 millones de dólares. Un éxito total. Aunque varios medios, como L.A. Times, se empeñan en recalcar que, con todo esto, la película ha resultado menos rentable que su predecesora, que hizo 318 millones de dólares en la taquilla americana y una taquilla global de 585 millones. Lo que ocurre, es que el presupuesto de la primera entrega fue de 140 millones de dólares mientras Iron Man 2 ha costado 200 millones de dólares. Además, recalcan que el primer Iron Man tardó menos en salir de entre las diez primeras que Iron Man 2.

Si hacemos cuentas, es verdad que Iron Man fue mas rentable que Iron Man 2, pero tampoco es tanta la diferencia. De todos modos, dudo mucho que a Marvel Studios esto le importe mucho. Ya solo con la taquilla americana, Iron Man 2 ha recuperado con creces los 200 millones de dólares que costó y ha hecho 108 millones mas; por no hablar de que la película ha funcionado la mar de bien fuera de EEUU, siendo su recaudación mundial muy igualada con la recaudación americana, algo que no ocurre muchas veces. Y todo eso sin que la película haya sido estrenada en 3D, que eso ya es mérito a día de hoy. Y si es verdad que Iron Man tardó menos en salir de entre las diez primeras del box office, pero no olvidemos que la película fue una gran novedad en su día y que hace dos años las cosas estaban muy diferentes económicamente hablando.

Pero, vamos, se mire por donde se mire, Iron Man 2 ha sido todo un éxito, una de las películas mas taquilleras del año y, desde luego, no puede hablarse en ningún momento de fracaso. No es el caso de, por ejemplo, Prince of Persia: Las Arenas de Tiempo, que con un presupuesto también de 200 millones de dólares, a día de hoy, ni tan siquiera ha logrado superar los 100 millones de dólares en la taquilla americana y que salva los muebles gracias a la taquilla mundial; algo que no creo que le haya hecho mucha gracia al productor Jerry Bruckheimer, quién tenía pensado iniciar una nueva franquicia como la de Piratas del Caribe con este film.