La Fox y el propio Aronofsky lo han hecho público hoy. Las razones las ha dado el propio director, quién afirma que, aunque le encanta el guión de Christopher McQuarrie y tenía muchas ganas de trabajar de nuevo con Hugh Jackman, no le agradaba estar ligado a un proyecto que le iba a tener casi un año alejado de su familia. Por su parte, el estudio afirma que, aunque están decepcionados con él, respetan su decisión y, además, agradecen el trabajo que este ha hecho para ellos en El Luchador (2008) y Cisne Negro (2010) -las cuales fueron producidas por su división independiente -. Además, aseguran que el proyecto sigue adelante y ya están buscando un nuevo director.
No obstante, esto, seguramente, supondrá un retraso en la producción. Estaba previsto que el rodaje comenzara en abril con vistas a estrenarla en 2012. No obstante, tendrán que retrasarlo para que el nuevo director pueda adaptarse. Aunque, este no es el único problema que se les presenta. Gran parte del rodaje iba a tener lugar en Japón, país donde se desarrolla la historia, pero, con lo que está pasando allí últimamente, seguro que tendrán que buscarse otras localizaciones. Veremos a ver que pasa.
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