El actor y director Richard Attenborough ha fallecido a los 90 años de edad. Attenborough, que tenía el título de Sir tras recibir el título de Caballero del Imperio Británico en 1976 y el de Lord tras ser nombrado Barón en 1993, llevaba en silla de ruedas tras sufrir un ictus en 2008 y, desde 2013, residía junto a su esposa en una residencia. A parte de su carrera cinematográfica, sirvió en la fuerza aérea británica durante la II Guerra Mundial, fue un gran filántropo promoviendo el arte y la educación durante años y era hermano mayor del famoso naturalista David Attenborough.
Debutó como actor con la película Sangre, Sudor y Lágrimas (David Lean y Noel Coward, 1942), pero la fama no le llegaría hasta 1947, cuando protagonizó la película Brighton Rock, de John Boulting, adaptación de la novela homónima de Graham Greene. Aunque, a cambio de la fama, tuvo que arrastrar el estar encasillado en ese tipo de papeles durante unos años. Sin embargo, pronto logró destacar como un actor prolífico. De su inmensa filmografía destacan títulos como Salida al Amanecer (Roy Ward Baker, 1950), El Bebé y el Acorazado (Jay Lewis, 1956), Comando de la Muerte (Guy Green, 1958), Estoy Bien, Jack (John Boulting, 1959), Juego para Dos (Sidney Gilliat, 1962), La Gran Evasión (John Sturges, 1963), El Vuelo del Fénix (Robert Aldrich, 1965), El Extravagante doctor Dolittle (Richard Fleischer, 1967), El Código de los Inmorales (Basil Dearden, 1968), Los Pecados de la Señora Blossom (Joseph McGrath, 1969), El Estrangulador de Rillington Place (Richard Fleischer, 1971), Diez Negritos (Peter Collinson, 1974), Culpable sin Rostro (Michael Anderson, 1975) o Los Jugadores de Ajedrez (Satyajit Ray, 1977).
Después de El Factor Humano (Otto Preminger, 1979), anunció que se retiraba como actor para centrarse en su carrera como director, la cual comenzó con la película musical ¡Oh, qué Guerra tan Bonita! (1969). No obstante, regresó en 1993 a petición de Steven Spielberg para dar vida al multimillonario John Hammond en la exitosa Parque Jurásico; papel que repetiría en su primera secuela, El Mundo Perdido: Jurassic Park (1997), también a las órdenes de Spielberg. Otros trabajos como actor destacables en esta nueva etapa son Milagro en la Ciudad (Les Mayfield, 1994), Hamlet (Kenneth Branagh, 1996) o Elizabeth (Shekhar Kapur, 1998).
En su carrera como director, dirigió títulos como El Joven Winston (1972), Un Puente Lejano (1977) y Magic (1978) antes de realizar su gran obra maestra, Gandhi (1982), gran superproducción sobre el famoso libertador indio a la que dedicó 9 años de su vida y cuyo esfuerzo se vio recompensado con un gran éxito y el triunfo de la película en los oscars; incluyendo el de mejor director para él. Después dirigió películas como el musical A Chorus Line (1985), la comprometida Grita Libertad (1987), su regreso al cine biográfico con Chaplin (1992), su versión de la obra de C. S. Lewis, Tierras de Penunbra (1993), la romántica En el Amor y el la Guerra (1996), la ecologista Búho Gris (1999) o su última película como director que, curiosamente, se llama Cerrando el Círculo (2007).
Cuando aún no se han apagado los ecos de las muertes de Robin Williams y Lauren Bacall, el mundo del cine ha sufrido otra gran pérdida que deja un gran hueco que va a ser muy difícil de rellenar. Como tributo, aquí os dejo uno de sus mejores momentos en la película que hizo despertar mi pasión por el cine:
DESCANSE EN PAZ
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