Ya tenemos en cines el Episodio VIII de Star Wars y, tal y como se esperaba, está arrasando en taquilla; lo está haciendo menos que su antecesora, Star Wars: El Despertar de la Fuerza (J.J. Abrams, 2015), que es otra cosa que también se esperaba, pero sus resultados no se alejan tanto. Ya el día de su estreno logró recaudar 104 millones de dólares en la taquilla estadounidense, siendo la segunda película que logra más de 100 millones en EEUU en su estreno, por detrás del Episodio VII, que hizo 119 millones.
Ahora, se estima que la película de Rian Johnson lleva recaudados 220 millones de dólares este fin de semana, siendo el segundo mejor arranque de la historia en EEUU; también por detrás de
El Despertar de la Fuerza, que hizo 247 millones. En el resto del mundo tampoco le van mal las cosas. Hasta ahora, lleva recaudados 230 millones en la taquilla internacional que hacen que su recaudación global ascienda a 450 millones de dólares; por encima de los 425 millones que le daban las previsiones. Sin duda, la película va a ser un gran taquillazo; puede que no llegue a los 2.000 millones que hizo su antecesora, pero seguro que se le queda cerca.
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